La actividad comercial en el mundo
mostró una relativa recuperación en su marcha luego del apagón generado tras la
crisis financiera del año 2007, sin embargo la dinámica del mercado de bienes y
servicios globales en años recientes de nuevo muestra síntomas de agotamiento.
Mientras el crecimiento del
comercio como porcentaje del producto interno bruto global creció un 40% entre
1960 y el año 2011, dicho crecimiento se
ha ralentizado e incluso contraído desde entonces, lo que para administradores de
fondos internacionales como Marino Valensise representa la probabilidad de que la globalización haya alcanzado
sus propios límites.
De hecho la Organización Mundial
del Comercio estima que en el año 2016 el comercio global crecerá a su menor
nivel desde el año 2007. Entre las explicaciones al fenómeno está el
proteccionismo comercial y factores geopolíticos internacionales como el
reverdecer de las tensiones entre Occidente con Rusia y China así como el
Brexit.