Según la información de British
Petroleum, Estados Unidos ha presentado un déficit histórico en materia de
petróleo, algo que prevalece en años recientes pese a la adopción de la
tecnología del fracking y al desarrollo
del petróleo no convencional en su territorio.
Sin duda, el petróleo obtenido
mediante fracking invirtió la caída sostenida que mostró la producción de
petróleo convencional en la Unión Americana y que sobrevino visiblemente desde la
década de los ochentas, evidente porque su producción pasó de 317 millones de
barriles mes durante el año 1985 a 203 millones de barriles mes en el año 2008. La recuperación, que se soporta en la fractura hidráulica, se presenta entre el año 2008 y el año 2016, cuando al final del periodo se logra el record de producción de 371 millones de barriles al mes, pese a lo cual Estados Unidos no logra autosuficiencia por lo que debe importar 218 millones de barriles mes.
Así las cosas, la disputa por el
oro negro en el mundo, se puede afirmar, no ha dejado de ser un factor
determinante para comprender la geopolítica global.
Del total de importaciones, el país del
norte captó desde Libia el equivalente a 2 millones de barriles mensuales de petróleo
durante el año 2017.
Conozca la multimedia relacionada
en un servicio de las agendas de energía, economía, conflictos y biosfera.
