Los frentenacionalismos en
Occidente permitieron a EEUU desarrollar su agenda de progreso, de absorción
económica global y consolidación de la hegemonía terminada la segunda guerra
mundial.
Sin embargo, la crisis de las demo-cracias liberales y la necesidad de profundizar el expolio que salga al paso al problema de la producción de EEUU está abriendo otro formato en las relaciones internacionales y Trump es expresión de ello.
Ahora las presiones del gobierno electo de EEUU a los países, para que adopten sus políticas, dejan de lado la ONU donde Washington buscó legitimidad de su agenda injerencista y de guerras, en el periodo de la bipolaridad y unipolaridad, al matoneo en redes de los mandatarios de los países, y no escapan los allende aliados occidentales por décadas por lo que se ve en las abrasivas declaraciones que Elon Musk hace de las autoridades Alemanas, donde al presidente Frank-Walter Steinmeier le llama tirano y al canciller Scholz le denomina "bufón".
De las "armas de destrucción masiva" de 2003 en Iraq, nunca halladas o la "guerra humanitaria" en 1991 contra Yugoslavia(lo que evidencia fines cuando se conoce hoy el papel de EEUU en la situación de Palestina), son ejemplos, pero un formato que se repite y un modelo con el que se justificó el avance imperial occidental que ahora migra al formato de noticias falsas en redes y deslegitimación de las autoridades estatales de los países, y lo peor que puede esperarse es que a la postre se lancen el abanico híbrido de ataques correspondientes, a fines a la idea de convertir Canadá en el estado número 51 de Estados Unidos(que ya desató una crisis de gobierno en Ottawa y hace prever la caída del primer ministro Trudeau), la intervención de Mexico so pretexto del problema de los carteles de la droga(cero sobre los que existen en EEUU o que tienen asiento en metrópolis Occidentales) y la inmigración, "comprar" Groenlandia a Dinamarca o el retomar el control del Canal de Panamá bajo el supuesto que la administración del paso interoceánico beneficia a China.
Como se ve es cualquiera la "justificación" para definir el actuar de una potencia militar global pero en declive económico.
Ahora bien, la situación interna de EEUU también tiene un nuevo capítulo tras los intentos de homicidio del candidato, por entonces, Donald Trump, lo que aún puede hacer prever consecuencias o retaliaciones a sectores económicos sensibles que se consideren alentaron lo sucedido y derivar en la reconfiguración de Wall Street.
Apenas ha comenzado el año y se han presentado dos sucesos que llaman la atención y que involucra ex militares del ejército de EEUU: uno en Luisiana con la muerte de 15 personas(con una bandera izada del Estado Islámico en el bumper trasero del vehículo usado, para desviar la atención) y otro, con la explosión de un Cybertruck de Tesla frente a un Hotel Trump en Las Vegas.