Por paradójico que parezca, mientras
que la lucha contra las drogas impulsada por EE.UU y específicamente en lo que
respecta a la marihuana mantiene su curso en países como Afganistán, Egipto,
India, Indonesia, México o Colombia, en
la Unión Americana ya son 20 los estados y el distrito de Columbia los que han
aprobado el consumo y producción de este producto tanto para usos medicinales
como recreativos.
Particularmente en el estado de Colorado, en enero de 2014 las personas mayores de 21 años podrán comprar marihuana sin
restricciones en dosis de hasta 28,5 gramos, lo que redundará en un crecimiento de este mercado hasta ahora
limitado a 110 mil personas que podían adquirir marihuana bajo prescripción
médica.
Ante esta realidad, la percepción
sobre la lucha contra las drogas parece estar dando un viraje, por lo pronto al
interior de los Estados Unidos. En la
presentación de la estrategia contra las
drogas 2013 de este país, el titular de la Oficina Nacional de
Políticas para el Control de las Drogas de la Casa Blanca, Gil Kerlikowske,
reconoce que la problemática no se solucionará “mediante arrestos ni mediante
la legalización de las drogas".
La novedad es que se
enfocaran los esfuerzos hacia la captura de
narcotraficantes mientras se elimina la persecución a los consumidores
quienes, según la nueva estrategia, serán asistidos por
programas de tratamiento del
consumo como por equipos de profesionales que orientarán su actividad a mitigar los
problemas mentales de los adictos.
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