
La depresión de la tasa de crecimiento de la producción del "oro negro" no es despreciable. Entre los años 1997 a 2004, esta fue de aproximadamente un 10,3% mientras para el periodo 2004 a 2011 fue de 5,1%, es decir, una caída del 50 por ciento.
Sin embargo, estas cifras no pueden interpretarse como el estancamiento de las reservas globales, que gracias a la incursión en los balances del petróleo no convencional, actualmente se mantienen al alza, aplazando los efectos previsibles del cenit del petróleo convencional que ocurrió en la década de 1980.
Colombia no es ajena a este contexto dado que logró torcer los pronósticos del cenit petrolero que hacían prever problemas serios en los suministros precisamente este año, lo que ha podido eludirse mediante la explotación de pozos maduros y la utilización de los biocombustibles.
Aún así, Colombia con 2.250 millones de barriles de petróleo de reserva no tiene el camino despejado, dado que a los niveles de consumo actual las existencias alcalzarán a cubrir los requerimientos hasta el año 2020, lo que ha llevado al país a promover recientemente la exploración de 15 bloques para el aprovechamiento de petróleo no convencional, siguiendo la tendencia que se presenta en el mundo.
Aún así, Colombia con 2.250 millones de barriles de petróleo de reserva no tiene el camino despejado, dado que a los niveles de consumo actual las existencias alcalzarán a cubrir los requerimientos hasta el año 2020, lo que ha llevado al país a promover recientemente la exploración de 15 bloques para el aprovechamiento de petróleo no convencional, siguiendo la tendencia que se presenta en el mundo.