Pese a las exorbitantes inversiones
en explotación de petróleo no convencional en Estados Unidos, dicho país aún no
supera su dependencia de las importaciones de crudo.
De hecho en el periodo
comprendido entre el año 2008 y el año 2015, cuando se observa un incremento en
la producción nacional de crudo en Estados Unidos, sus importaciones del oro negro permanecieron en un promedio de
8,5 millones de barriles día.
Si bien en el balance producción consumo de petróleo en el mundo, se observa una ligera sobreoferta, lo cierto es que países como Estados Unidos y China y regiones como la Unión Europea, se caracterizan por una mayor o menor dependencia de importaciones de crudo, un fenómeno que contrasta con precios del petróleo que por momentos rozan los costos de producción en muchos países.
