2009/11/27

Emergencia social

Iván Saldarriaga

El presidente anunció hace una semana que decretará la emergencia social para enfrentar la grave situación financiera de las EPS que tienen reclamos enormes que no han sido atendidos, por servicios prestados por fuera del POS. Lo preocupante es que el hueco fiscal solo podrá ser llenado con aumentos de entradas ya sea por la vía de mayores impuestos o por la vía de un aumento de las contribuciones de los afiliados.

El aumento del desempleo, y la consecuente dificultad de una cantidad cada vez mayor de personas para cancelar esas contribuciones, hará que se recarguen, aún más, los servicios del Sisben que ya se encuentran bastante congestionados. Entre tanto el Ministerio de Protección Social aumenta los saldos en efectivo en el sistema financiero y negocia con tacañería los reclamos de las EPS.

En realidad la crisis social en Colombia se extiende más allá del sector de la salud. Se calcula que solo el 20% de los ancianos mayores de 65 años tienen pensión de jubilación. La tasa de desempleo de los jóvenes y de las mujeres en las comunas de nuestras ciudades es altísima y ello contribuye a agravar los problemas de orden público.

La deserción escolar por razones económicas aumenta y ya se acumulan un millón de de niños por fuera de las escuelas. La tasa de pobreza que, según el DANE, supera el 46% probablemente empeorará si se tiene en cuenta el aumento reciente de la tasa de desempleo.

Pero nada de esto va a ser tratado por los decretos de emergencia social que buscan solo remediar la situación de las EPS.