La tierra cultivable per cápita es la superficie geográfica destinada a la producción agropecuaria
de una región específica, país o
territorio divida por su número de habitantes.
En Colombia la superficie cultivable en hectáreas dividido por su población se ha contraído
sosteniblemente más de un 500 por ciento para el periodo comprendido entre los
años 1961 al año 2012, un fenómeno dinamizado, entre otros, por el crónico conflicto armado que tiene una
duración superior al medio siglo.
La población colombiana que se estima vive en condición de
desplazada asciende a 5,5 millones de personas o de otra forma el 12,5% de la
población total.