El balance producción/consumo de combustibles líquidos en el mundo, en los que se incluye petróleo, gas licuado,
etanol y biodiesel, y que se inclina actualmente hacia una sobreoferta global, explica de forma importante el declive de los
precios del oro negro, los cuales iniciaron una descolgada desde el mes de
junio de 2014 cuando el promedio mes del barril de crudo WTI paso de 103,59 dólares
a 59,27 dólares para el mes de mayo de
2015.
Un factor que soporta la sobreoferta mundial de combustibles líquidos,
es el salto de la producción petrolera
de Estados Unidos que para el periodo comprendido entre septiembre de 2008 y
junio de 2015 fue de un 46%, consecuencia en buena medida del boom de la tecnología
del fracking.
